Sonntag, 27. März 2011

Vuelta a Guyaquil

La noche la pasé, en vela. Ruido, música, voces y las alarmas de los coches, cada uno tiene un sonido distinto, impedian descansar.
Ducha de agua fria y a desayunar. Esta vez en otro sitio pero casi lo mismo.
En Ecuador la comida en general es poco ingeniosa. Pollo, gallina, platano frito, arroz, sopa de pollo y maiz, patatas con gallina (debe haber miles). Las ensaladas son acidas. En una palabra
prefiero la cocina de mi tierra, la italiana, o la alemana. La fruta exquisita.
Despues del desayuno, caminamos a la playa. Tranquilas, y felices contemplamos el Oceano que pronto abamdonariamos. El cielo estaba azul intenso, el aire era fresco, y a pesar de estar solo en la sombra, me quemé los ojos, nariz y frente. Me había dejado las gafas de sol en el hotel.
Con el autobus de las cinco, volvimos a Guayaquil.