Me pregunto, porque la clase media alta en todas partes del mundo es tan similar. En estos lugares la raza desaparece casí al completo. El hombre en dicho ambiente, se comporta, viste, come y huele de la misma forma. Ayer lo comprové. Estés donde estés. Sea Madrid, Colonia , Londres, o Moscu, der Wohlstand, se impone y uniforma.
Arquitectura, decoración, luces, comercios, cascadas iluminadas, multicines con olor a palomitas, chuches, muestran la sociedad de consumo, a la cual solo tienen acceso pocos. Aquí no noté diferencia alguna con otros paises. Ví gente atractiva, bien vestida, con clase, y estilo, rubias de bote y tacones de vertigo y vencí, debo admitir el primer prejuicio.
Al atardecer, nos fuimos Anika y yo con el taxista Mario, un tipo, medio chileno medio libanes, que me llevó hoy, de la péluqueria a casa, a ver una exposición en el Museo Arqueologico, organizada, por los profesores y estudiantes de la Facultad de Artes Plasticas e Imagen, de la Universidad donde estudia, Leonidas. Él fotografíaba el evento.
En este ambiente, tuve la oportunidad de conocer a pintores, fotógrafos y artistas. Tipos bohemios, que me gustan y con los que congenio facilmente. Despues de beber varios mojitos, el director es cubano, fuimos al Cerro de Santa Ana a tomar tapas. Las casas y locales, de noche iluminados, daban la sensación, de cuento de adas.
Paseando, en una noche fresca, de absoluto verano, volvimos, fröhlich und munter, nach Hause.
